Control de humedad y temperatura

La humedad relativa explica la cantidad de vapor de agua presente en el aire. Se expresa como un porcentaje de la cantidad necesaria para lograr la saturación a una temperatura determinada.

La humedad relativa suele ser proporcional a la temperatura y altamente sensible a sus cambios. Si una instalación tiene una temperatura estable su humedad relativa también lo será. Por tanto, el control de la humedad y la temperatura están íntimamente ligados.

La humedad puede provocar un elevado número de problemas en entornos industriales. En climas templados y en espacios abiertos, las condiciones de trabajo se pueden degradar debido a condiciones de humedad por encima del 60%.  Pero en espacios cerrados, una mala ventilación y una calidad deficiente del aire también puede generar condiciones de humedad más elevadas que repercutan en el estrés térmico de empleados y usuarios. Por otra parte, con humedad elevada se favorecen las condiciones para la expansión de sustancias tóxicas que contaminen superficies o contribuyan a provocar enfermedades.

Además de unas malas condiciones laborales, la humedad puede ser un foco de problemas si llega a condensar. En centros de distribución y operadores logísticos la humedad puede afectar al buen estado de las mercancías almacenadas o a los embalajes. De igual manera sucede en otros sectores industriales, como la industria farmacéutica o agroalimentaria, en las cuales el mantenimiento de unas condiciones específicas de humedad relativa es vital tanto en el proceso productivo como en la cadena logística.

Las fugas de agua, las salpicaduras o la corrosión puede derivar en paradas no planificadas en entornos industriales o en tiempos de mantenimiento mucho más elevados.

“La humedad en entornos industriales y comerciales afecta a la calidad del trabajo de los empleados y a la experiencia de clientes y usuarios. En entornos industriales un exceso de humedad puede afectar a los productos estocados y generar condensación. Luchar contra la humedad ayuda a disminuir los costes de mantenimiento y incrementar la vida útil de la maquinaria y otros elementos móviles”

Los ventiladores grandes de techo están específicamente diseñados para mover grandes caudales de aire en espacios de grandes dimensiones. Son un factor decisivo para mejorar la sensación de confort de los trabajadores, ya que optimizan la sensación térmica y reducen los niveles de humedad a estándares considerados salubres. Se entiende como salubre una humedad del 30-50% en espacios cerrados y  del 40-60% en espacios abiertos.

Al mezclar aire caliente de las capas superior con el aire más frío en las capas más cercanas al suelo, los ventiladores industriales HVLS contribuyen a incrementar la tasa de evaporación en la superficie y, por tanto, a minimizar las probabilidad de condensación.

Los ventiladores HVLS son la solución óptima para abordar los desafíos que provoca la humedad. Entre las mejoras notables que este sistema de ventilación puede aportar figuran las siguientes:

• Mejora de la productividad laboral.
• Menor humedad relativa del aire.
• Reducción de la condensación.
• Menor probabilidad de expansión de bacterias.
• Un aire más limpio y saludable.
• Mejora de la eficiencia energética en colaboración con sistemas de climatización para industria.

La elección del ventilador ideal para la reducción de la humedad relativa en el aire depende de diversos factores. Entre estos destacarían el clima, la actividad física de los empleados, el sistema HVAC, la maquinaria  o las características de los productos almacenados. También son factores a tener en cuenta la superficie total o elementos que obstruyan la operativa del ventilador. Entre dichos elementos se podrían incluir estanterías, maquinaria o zonas de trabajo de personal.

Desde luego las características del producto son importantes. Entre ellas destacarían la capacidad de adaptación a las necesidades del espacio a acondicionar, nivel de ruido, el peso total, la necesidad de mantenimiento, el consumo de energía, la garantía, las medidas de seguridad que incorpora o la uniformidad de la corriente de aire que genera.

Pero no son menos importantes otros factores vinculados a las capacidades del proveedor. Smart Fan puede ofrecer la solución técnica más adecuada para eliminar problemas de humedad, en especial en instalaciones de grandes dimensiones. También dispone de un servicio técnico flexible que reduce los costes asociados a su instalación y a su mantenimiento.

“Reducir la humedad ayuda a mejorar las condiciones laborales, disminuye el riesgo de mermas de stock producto de condiciones de almacenaje deficientes, alarga la vida de la instalación y reduce el coste de mantenimiento”